El presidente Javier Milei participó este domingo del tradicional Tedeum en la Catedral metropolitana junto a la vicepresidenta Victoria Villarruel y los ministros del flamante gabinete nacional. Luego de la jura de ministros -que se realizó a puertas cerradas- el mandatario nacional se trasladó a pie desde Casa Rosada a la Catedral para asistir a una ceremonia interreligiosa.
Milei caminó del brazo con Villarruel y junto al resto de sus nueve ministros y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse.
En la Catedral lo esperaba para recibirlo el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Ignacio García Cuerva. Junto a ellos, también participaron del rito religioso el arzobispo griego, Iosif Bosch; el obispo anglicano, Brian Williams; el representante de Aciera, que nuclea a las iglesias evangélicas, pastor Christian Hooft; el rabino ortodoxo y consejero de Milei, Shimon Axel Wahnish y el Sheik Salim Delgado Dassum, representante de la comunidad islámica.
"Tormentas de grietas"
El arzobispo porteño le pidió al jefe de Estado que trabaje por "la unidad de los argentinos". "Nuestra casa ha sufrido muchas tormentas, de exclusión, inflación, grietas, intereses mezquinos y desencantos. Hay que valorar nuestros cimientos y mantener la esperanza en los momentos más acérrimos. Siempre es posible renacer si lo hacemos entre todos", expresó García Cuerva.
Y agregó: "Uno de los cimientos más golpeados que necesitamos forjar es la fraternidad, trabajar la unidad de los argentinos. Es necesario reconocer que somos una comunidad. Hay que dejar de lado personalismos". En ese sentido, el arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina remarcó la importancia de "renacer entre todos", luego de que el país haya sufrido "tormentas de grietas".
Milagros, fe y deseos
A su turno, el rabino Wahnish mantuvo un emotivo diálogo con Milei. El consejero espiritual del Presidente citó los Salmos y aseguró que "el valor humano consiste en la capacidad de caerse y volver a levantarse". "Y como pueblo argentino sabemos de eso, levantarnos y volver a empezar de nuevo", consideró. "Dios tiene fe en usted, Señor Presidente, en los gobernantes, que nos vamos a poner de pie los argentinos, una sociedad con justicia y bondad", expresó.
"¿Cuál es su deseo, Señor Presidente?", preguntó Wahnish. "Poner de pie a la Argentina", contestó Milei desde su asiento. "Le voy a pedir a Dios que le conceda algo que él pide desde hace mucho tiempo: sabiduría, templanza y coraje", enumeró el rabino. En las últimas horas, trascendió que el religioso podría ser propuesto al Senado como embajador argentino en Israel.